viernes, 22 de octubre de 2010

Argumentos comunes de un hijo enfermo:

• ""Estoy sano','
Tengamos en cuenta que el paciente no tiene conciencia de enfermedad.
• ""Quiero engordar, pero...""
En nuestra desesperación insistimos para que coma, aunque sea un poco. Seguramente nuestros ruegos o amenazas serán inútiles. Se seguirá viendo gordo y persistirá con su dieta. Sin embargo puede ocurrir que reconozca estar flaco y asegure que está haciendo esfuerzos por aumentar de peso sin resultado. En ocasiones, se animará a comer delante de nosotros para sostener su teoría. Esté atento entonces: ¿cuántos ayunos se alteran con tas comidas? ¿Existen conductas purgativas que podamos detectar?
• ""La comida me cae mal""
Esta excusa es muy frecuente para justificar el ayuno o fa alimentación insuficiente. En ocasiones, los padres angustiados deambulan por infinidad de especialistas, realizan todo tipo de estudios con resultados negativos. Pese a ello, el paciente insiste con su mai imaginario y se niega a comer.
• ""Ahora soy vegetariano""
Con el aparente propósito de llevar una vida saludable, el paciente decide suprimir algunos aumentos. Lo hace con los que considera que tienen mayor valor calórico, entonces elige sólo algunas verduras (a veces un poco de queso). Prefiere generalmente el zapallo y la zanahoria, logrando de esta manera su objetivo de bajar de peso.
• ""Mis ocupaciones me impiden comer en casa""
Las tareas escolares, el trabajo, los compromisos ineludibles, los exámenes o el estudio suelen utilizarse como argumento para no comer en casa. Su objetivo es que no lo veamos comer (para hacerlo a escondidas o para no comer).
• ""Estoy constipado, necesito una medicación""
No se deje engañar, cada persona tiene su propio ritmo biológico. No es necesario auto medicarse. Una buena aumentación y una vida sana, es ia solución.
• ""Soy grande para que me controlen""
Cuando esta frase se repite con frecuencia es muy posible que nuestras sospechas estén bien fundadas. En nombre de la
libertad,
el paciente pretende ocultar sus conductas y persistir en sus hábitos.
• ""Que nadie entre a mi cuarto""
Es sorprendente conocer el cuarto de un bulímico. La experiencia va más allá de lo imaginable. Resulta ser el espacio donde todas las conductas patológicas pueden practicarse en secreto. El desorden y el caos reinan, y podemos hallar desde restos de comida, paquetes de galletitas, chocolates, etc. Todo es posible "


Un camino peligroso


A la Anorexia Nerviosa y a la Bulimia se llega siempre por el camino de la dieta. La presión social es muy grande, tanto que no hay reunión en la que no se toque el tema del ""peso""de los ""kilitos de más"" o de ""la dieta de moda""
En general, toda la población está preocupada por la figura y de esta manera el culto al cuerpo es el caldo de cultivo donde la enfermedad brota y se expande. Por eso es que hay que controlar el cómo y los por quede la necesidad de emprender una dieta, fundamentalmente cuando el aspecto físico no lo requiere. Allí puede estar escondiéndose un anoréxico en potencia.


Cuidado con el alumno ejemplar

No se trata, claro está, defomentar la despreocupación por los estudios. Sin embargo, hay que prestarle mucha atención a lo que solemos catalogar como alumno ejemplar. Como resulta natural en los maestros (también en los padres),la presentación de sus trabajos, su dedicación al estudio, sus rutinas, despiertan admiración Junta como para ser puesto como ejemplo ante el resto de la clase. Se lo considerad mejoran embargo, este tipo de personalidad, donde el perfeccionamiento se manifiesta en todo momento, es característico del anoréxico.


Observemos entonces: ¿Se muestra obsesivo con su físico? ¿Se esfuerza por conseguir""el cuerpo perfecto""? ¿Cómo es su alimentación y su actividad física?
Descubramos a tiempo la Anorexia Nerviosa. A veces está escondida en la abanderada de la escuela .



Bulimia y Anorexia, ¿Cómo reconocer los síntomas?


"Las personas que padecen este trastorno, se sienten como si no tuvieran una identidad propia o lo suficientemente fuerte como para enfrentar la vida y, por su inestabilidad emocionarse encuentran a merced de sus propios impulsora los que no saben poner límites. Algunos entonces, sufren de anorexia o de bulimia; otros, en cambio, se hacen adictos al alcohol o las drogas. De lo que debe tomarse conciencia es que estas enfermedades, que afectan a uno de cada 25 jóvenes en nuestro país, son realmente graves. Tanto que hasta pueden llevara la muerte.

Los textos médicos definen la Anorexia Nerviosa como un desorden alimentario, en el cual la persona afectada se niega a comer y su peso disminuye hasta comprometer seriamente la salud. En casi el 90% de los casos, las pacientes son mujeres de entre 10 y 29 años. Un detalle particular de esta enfermedad, es que las anoréxicas se perciben gordas, aunque su peso esté muy por debajo de lo indicado para su contextura.

Por su parte, la Bulimia es un trastorno en el que el afectado se da atracones de comida y luego se provoca vómitos, se administra laxantes o diuréticos y realiza ejercicios físicos extenuantes, para expulsar o quemar la ingesta compulsiva.


Las señales más claras de estas enfermedades se descubren a través del rechazo a mantener el peso corporal correspondiente por edad y talla, lo que ocasiona una pérdida importante de peso, el temor intenso a engordarla alteración de la imagen del cuerpo en la que la persona se ve o se siente gorda, a pesar de estar muy delgada, la ausencia de al menos 3 ciclos menstruales consecutivos en las mujeres, la presencia de atracones recurrentes en los que la persona siente que pierde el control sobre la comida, tras lo cual vienen las ""Compensaciones"" como son los vómitos, el abuso de laxantes o diuréticos, el excesivo ejercicio físico, ayunos y la ingesta de diversos fármacos ""adelgazantes""

Ante estas manifestaciones se hace imprescindible buscar la ayuda profesional, porque las consecuencias son realmente preocupantes hasta temibles:

• Agravamiento del estado de salud e, inclusive muerte a causa de la enfermedad.
• Problemas en el colegio en el trabajo con la familia y con la sociedad.
• Pérdida de la autoestima.
• Deterioro de la personalidad.
• Imposibilidad de independencia ni autosuficiencia.
• Problemas para una inserción social adecuada.

Finalmente, hay que tomar muy en cuenta que el paciente suele no tener conciencia de la enfermedad (al igual que el drogadicto o el alcohólico es un permanente negador del problema), no estar interesado en curarse, no sincerar sus síntomas y no cumplir con las prescripciones médicas. Esto hace que el acompañamiento familiar sea indispensable para revertir la situación.

Signos distintivos de cada alteración


ANORÉXICOS:

• Negación de la enfermedad.
Miedo intenso a la obesidad.
• Se ven gordos a pesar de tener bajo peso.
• Rechazo a mantener el peso en nivel normal.
• Caída del cabello.
• Amenorrea, piel seca.
• Hipotensión e Hipotermia.
• Cortan los alimentos en trozos pequeños.
• Comen lentamente.
• Mastican largo rato antes de tragar.
• Prefieren pequeñas porciones.
• Tiran escupen o esconden la comida.
• Pueden consumir anorexígenos, laxantes y diuréticos.
• Cuentan las calorías de cada alimento.
• Tienen rituales con la comida.
• Realizan hiperactividad para bajar de peso.
• Se aíslan socialmente.
• Se tornan irritables.
• Existe depresión en el 40 ó 45 % de los casos.
• Tienen conductas obsesivas.
• Se imponen auto exigencias.
• Rechazo a la sexualidad.
• Pueden darse atracones.
• Usan ropa suelta (se tapan el cuerpo).

BULÍMICOS:
• Episodios recurrentes de voracidad.
• Conciencia de que el patrón alimentario es anormal.
• Sentimiento de no poder para la ingesta.
• Oscilaciones significativas de peso.
• Deterioro de piezas dentarías en vomitadores.
• Alternan con ciclos restrictivos.
• Conductas compensador como: escupir, abuso de laxantes, abuso de líquidos para compensar el hambre o provocar el vómito.
• Ayuno.
• Hiperactividad.
• Cortan los alimentos en trozos grandes y comen rápidamente.
• Apenas mastican o tragan sin masticar.
• Prefieren grandes porciones.
• Son mayormente abúlicos.
• Engrosamiento glandular (parótida) en vomitadores.
• El carácter se vuelve irritable
• Se sienten culpables.
• Comen a escondidas.
• Roban para comprar comidas.
• Obsesión por la silueta y el peso.
• Oscilan entre la auto exigencia y el abandono.
• Oscilan entre la euforia y la depresión.
• Suelen abandonar todo lo que emprenden.


Los trastornos o desordenes alimentarios pueden afectar a personas de cualquier edad, pero son mucho más frecuentes en los adolescentes. Esto se explica porque la adolescencia es un momento de gran vulnerabilidad, donde los jóvenes empiezan a sufrir cambios en el cuerpo y en su vida social. Es el momento donde comienza la maduración de los órganos sexuales y donde se abre el camino a la exogamia, saliendo de la exclusividad de la vida social familiar para introducirse en el mundo universitario, laboral y conyugal.

A partir de la adolescencia los modelos sociales comienzan a agregarse a los familiares y a los del reducido ámbito de la escolaridad primaria.

Los especialistas sostienen que vivimos en una sociedad muy difícil para las nuevas generaciones. Los modelos que imponen los medios de comunicación, los problemas familiares, las tensiones sociales son todos factores que pueden contribuir al desencadenamiento de un trastorno de la alimentación.

Los trastornos más conocidos son la bulimia y la anorexia nerviosa. Laanorexia nerviosa se caracteriza por un temor exagerado a volverse obeso que va acompañado de ingestas cada vez más reducidas, la bulimiase caracteriza por una oscilación en la alimentación donde la persona puede pasar del no comer nada a darse grandes atracones de comida.

Características de la anorexia nerviosa:

-Rechazo a comer

-Importante perdida de peso, alcanzando valores muy inferiores a los normales.

-Miedo desmedido a aumentar de peso o volverse obeso

-Distorsión de la imagen corporal y negación del problema

-Falta de ciclo menstrual

Características de la bulimia

-Atracones de comida seguidos por periodos de ayuno

-Utilización de métodos purgativos: vómitos auto-inducidos, laxantes, pastillas.

-Sensación de perdida de control: Impulsividad

-Extrema preocupación por la imagen del cuerpo

Una característica común en ambas afecciones es la distorsión de la imagen corporal, es decir la persona suele verse gorda aunque este extremadamente delgada. Otra característica común es el uso de ropas grandes que ocultan el cuerpo, y el deterioro de los vínculos sociales, aislamiento y falta de interés sexual.

La personas que sufren este tipo de trastorno suelen ocultarlo a los demás, por eso el Dr Ahmed Boachie, jefe del programa de desordenes alimentarios del centro regional de Southlake en Newmarket, Ontario avisa sobre una serie de signos que pueden estar indicando la presencia de un problema alimenticio, la persona:

-Presenta un cambio general de actitud: depresión, retraimiento, falta de interés.

-Comienza a usa ropas holgadas

-Suele sentir frío todo el tiempo

-Puede presentar episodios de agitación

-Empieza a jugar con la comida, cortándola en trozos muy pequeños, dejando gran cantidad de desperdicio en el plato

-Controla los ingredientes y calorías de cada comida.

Cuando el entorno sospecha de la existencia de un trastorno alimenticio es conveniente realizar la consulta con un especialista para determinar los pasos a seguir. Un tratamiento posible es la internación en una institución especializada, donde se hacen tratamiento grupales y se utilizan normas de alimentación bastante rígidas. Si bien los tratamientos en instituciones son altamente efectivos en el momento, no lo son a la hora de las recaídas. Por eso es aconsejable que si hay un entorno familiar y social dispuesto a ayudar, se realice tratamiento ambulatorio (sin internación) acompañando la psicoterapia individual con terapia grupal o familiar.

jueves, 21 de octubre de 2010

Testimonio de joven bulimica :

Hola a todos los que me leais. Mi nombre es María José. Tengo 28 años. En realidad no se si va a servir de algo que escriba mi rabia, o intente reflejarla aquí. Supongo que no. Pero al menos informaré al resto del mundo de las pocas ayudas que recibimos esos enfermos tan raros y cada vez más frecuentes que somos los que tenemos un trastorno de alimentacion.

No recuerdo exactamente qué día fué el primero que introduje mis dedos en mi garganta para expulsar lo que había comido, pero debio de ser muy pronto, porque una compañera de 1º de BUP me sorprendio y me cruzo la cara. Fué una época cortita, de un par de meses. Lo grave vino después de visitar a mi familia en un pueblo del sur unos años después.

Yo ya tenía 20 años. Siempre he sido rellenita, y aunque en mis años adolescentes fuí más bien tirando a gorda, conseguí adelgazar y en ese momento era redondita simplemente. Llevaba 3 años con mi novio, un chico guapísimo que no me permitá ser yo misma, aunque era muy bueno y nos queríamos muchísimo. En esas vacaciones, me reencontré con mi prima, que había enfermado de bulímia. Había llegado a pesar 38 kgs, se había intentado suicidar 2 veces, y estaba en proceso de recuperacion con psicologos, psiquiatras, y la familia continuamente pendiente de ella. Yo no pdía llegar a entender como una persona podía llegar a caer en ello. Pensaba como piensan ahora la gente a la que yo se lo cuento: Porque no deja de vomitar??

Regresé de mis vacaciones y vuelta a la normalidad. Llegaron las Navidades, después enero, y ... ooohhh.... 3 kgs más. Eso no podía ser. Porqué no intentaba vomitar como mi prima? A mi no me iba a pasar como a ella.

Fuí al baño, y...maravilloso... Tuve la gran desgracia de que no me costo absolutamente nada expulsar aquello que me engordaba. Asique cada vez que comía, el baño era mi refugio. Y lo que era mejor. La báscula cada vez marcaba menos peso.

Porque la farmacéutica se convirtio en mi mejor amiga. Todos los días gastaba 25 ptas en pesarme. Mezclé la anorexia con la bulímia durante un tiempo, al comer poquísimo y encima vomitarlo. Después llegaban días de atracones descontrolados, que expulsaba también.

Y en menos de 3 meses,mi redondo cuerpo paso de pesar 70 kgs a pesar 50. Y mi caracter simpático y sociable siguo asi de puertas para afuera, porque mi familia no me aguantaba y perdí mi relacion de 4 años con mi novio.

Pero esto no dura siempre. Llega un momento en que tu obsesion por vomitar ya no persigue adelgazar. Al principio vomitas nada más comer, para que no te engorde. espués te entra pereza, y empiezas a vomitar a la hora, dos horas...

Yo he llegado a quedarme dormida después de cenar y vomitar a la mañana siguiente... Intentarlo.
Un saludo y beso a todos

¿Cómo prevenir la anorexia?

Cuando existe un caso claro de anorexia, el tratamiento sólo puede llevarse a cabo por profesionales, no olvidemos que médicos, psicólogos y psiquiatras pueden ayudarnos. Ahora bien, existen una serie de pautas que pueden ayudar a que la persona se acepte a sí misma e interprete adecuadamente los mensajes que le llegan de los medios de comunicación:

  1. Valorar a la persona por sus cualidades humanas antes que físicas.
  2. Procuremos ver a los demás como son, lo que hacen y no su aspecto físico.
  3. Practicar hábitos alimenticios sanos y equilibrados, comiendo en proporciones adecuadas.
  4. No dar excesiva importancia a las dietas ni al peso.
  5. Valorar el deporte y la actividad física como recurso que nos ayuda a sentirnos bien y compartir esa actividad física con los demás.
  6. No dar excesiva importancia a las dietas ni al peso.
  7. Actuar críticamente ante los anuncios publicitarios que se centran en la imagen corporal.
  8. No creernos todo lo que nos cuentan o enseñan por la T.V.

¿Cómo prevenir la bulimia?

Para poner en práctica las medidas preventivas es necesaria la participación de toda la familia, y todo el equipo interdisciplinario de salud.

Para ello la familia debe estar atenta a las conductas no habituales que tenga la adolescente, como por ejemplo:

· Retirarse habitualmente de la mesa para ir al baño.

· No querer compartir la comida familiar en determinadas ocasiones.

· Realizar ejercicios físicos en forma extrema.

· Ocultar comida.

· Levantarse por la noche para comer, entre otras.

En cuanto a los profesionales de la salud, deben estar atentos a:

· Determinados parámetros de sangre como el potasio, sodio, hepatograma, glóbulos rojos, etc; como así también, la relación peso/edad y peso/talla.

· Es importante tener presente que si dentro de una familia, la mayoría de sus integrantes son obesos o tienen sobrepeso, la probabilidad de que un adolescente miembro de esa familia padezca de obesidad es alta, por ello una de las formas de evitar trastornos de la alimentación, tales como la bulimia, es tratar la obesidad familiar. El acompañamiento familiar en la realización de unplan de alimentación supervisado por un médico, reduce la posibilidad de que la o el joven padezca bulimia.

La intervención temprana de la familia, ayuda a evitar las complicaciones derivadas de la bulimia, que no sólo afecta a ese niño/a, sino a toda la familia que la rodea.

Recuerda que estar atento a nuestros hijos, puede ayudar en la prevención de muchas enfermedades, entre las cuales se encuentra la bulimia.